La serie “Sobre Blanco” nace de la exploración, siempre desde la abstracción, sobre el soporte y la pregunta acerca de dónde está el límite entre el campo plástico y lo real, el campo visual y el mundo circundante. En su ensayo “El marco Dorado” Ortega y Gasset indaga sobre el papel que cumple el marco, su función y cuál sería el mejor marco, el cual cumpla las condiciones de encerrar, limitar, ser frontera entre el arte (la ficción) y la “pared”, una especie de recipiente que evita que se derrame la obra por sobre la pared, o que ésta misma termine por invadirla, de alguna manera. En este sentido, en esta búsqueda sobre la temática el punto de partida, o de llegada (o el nudo en cuestión) es que la obra pase a conformarse (co-formarse) junto con su medio, con su pared (blanca), de manera que nos haga dudar y preguntar si la obra acaba en el soporte, o continúa o dialoga con la misma pared en la que se apoya, si el medio circundante forma parte de la obra. O sea, nos encontramos con el cuestionamiento de qué es propiamente, o cuál es propiamente, el “campo plástico”; el campo plástico es sólo el soporte?, o se extiende al campo visual?, o podemos formar parte del mismo?...Para seguir pensando.